Tarta de pollo, champiñones y bacon
De la misma forma que la pasta penne cremosa con pollo y champiñones o la pizza de pollo con champiñones y queso, la receta de hoy te va a dejar la boca abierta con ingredientes que tenemos en la cocina: una tarta de pollo, champiñones y bacon.
Las tartas suelen ser dulces, pero esta cake extrae lo mejor de estos dos alimentos, procedentes de la naturaleza, para convertir el plato en un auténtico manjar. Prepárate para hacérselo a los más pequeños siempre que quieran, pero también a los más grandes de la casa.
¿Te animas? ¡Adelante!
Receta: Tarta de pollo, champiñones y bacon
Ingredientes
- 225 gr. de harina de fuerza
- 1 cucharadita de impulsor químico (levadura)
- 1 huevo
- 60 gr. de nata 35% M.G.
- 125 gr. de mantequilla y un poco más para engrasar el molde
- 30 ml. de vino blanco
- 30 gr. de puerro
- 50 gr. de bacón en taquitos
- 50 gr. de champiñones
- 25 gr. de aceitunas negras sin hueso
- 150 gr. de pollo asado
- 1 cucharadita de postre de hierbas provenzales
- Sal y pimienta
- Aceite de oliva
Elaboración
Corta el puerro en rodajitas finas, por la parte blanca, y rehógalo en un poco de aceite de oliva. Añade los taquitos de bacón y deja que se doren. Sube el fuego y saltea los champiñones cortados en trocitos, y procede a sazonar con un poco de sal y pimienta.
Continúa desmenuzando el pollo asado y cortando las aceitunas en 4 trozos. Bate el huevo con una batidora eléctrica hasta que se quede ligeramente espumoso, añade la mantequilla deshecha y templada, el vino y la nata y continúa batiendo.
Añade ahora los ingredientes secos, la harina, la levadura y las hierbas aromáticas. Mezcla hasta que esté todo bien integrado y añade el puerro, bacon, champiñones, el pollo y las aceitunas. Mezcla con suavidad con la ayuda de una espátula y corrige la sazón.
Ahora solo tienes que verter la masa en un molde de plum cake engrasado con mantequilla y cocer en el horno precalentado a 180º durante 40 minutos, o hasta que salga limpio el palillo cuando lo limpies. Retira y deja enfriar sobre la rejilla, hasta el momento de servir.
Es entonces cuando puedes desatar tu creatividad. Preséntalo en tacos, en tiras o como más te guste para enamorar a todos los comensales, y verás como te piden repetir enseguida. ¡Que aproveche!