A más de uno se nos ha hecho la boca agua cuando hemos ido a la pollería y hemos visto a las deliciosas aves dando vueltas en el asador del pollo al ast. El color miel tostado, junto con el olor a carne recién hecha, es una auténtica delicia para los sentidos.

Como no queremos que te quedes sin conocer una receta tierna y jugosa para despertar todos nuestros instintos culinarios, te hemos preparado los ingredientes y los pasos a seguir para hacer un plato que no puede faltar en nuestras mesas este otoño.

Lo mejor del pollo al ast es que puedes acompañarlo con muchas guarniciones excelentes como ensaladas, patatas al horno o pimientos asados. También te recomendamos otras recetas para tus comidas de fin de semana, como croquetas de pollo asado, berenjenas rellenas o un delicioso pollo a la sidra.

Receta: Pollo al ast

Ingredientes

• 1 pollo campero, libre de plumas y con el interior vacío
• 1 limón
• 300 ml de agua
• ½ cebolla tierna
• 2 ramas de tomillo y romero
• 1 chorrito de brandy
• Aceite de oliva
• Sal y pimienta
• 2 dientes de ajo
• 2 hojas de laurel
• Guarnición a elegir: ensaladas, patatas o boniatos asados.

 Elaboración

Lo primero es colocar el pollo en una rejilla del horno, con una bandeja debajo. Esto nos permitirá que la piel se tueste y quede verdaderamente sabrosa. Eso sí, si tienes una accesorio para hacer el pollo al ast y que dé vueltas mientras se dora, mejor aún. Aprovecha para precalentar el horno a 180 grados.

Si lo has comprado vacío, introduce una rama de romero, otra de tomillo, una cucharada sopera de brandy, unas rodajas de limón y sal y pimienta. No te olvides de introducir medio limón para cerrar el pollo y que se cocine perfectamente.

Píntalo con el aceite, corta la media cebolla en tiras finas y aplasta los ajos con un mortero. Colócalos en la bandeja del horno del pollo al ast, junto con unas cuantas rodajas de limón, otras ramas de romero y tomillo, laurel, pimienta negra y sal. Añade el agua y dos cucharadas soperas de brandy.

Introduce el pollo al ast en el horno, procurando que se encuentre encima de la rejilla y que la bandeja quede justo debajo. Intenta que se hornee 30 minutos por cada 500 gr de pollo para que te quede en la textura perfecta, y no tengas miedo de añadir otros 100 ml de agua de forma que la salsa quede espesa y exquisita.

Cuando le queden 10 o 15 minutos para acabar, sube el horno a 200º y vigila que la piel quede tal y como te gusta. A algunos les gusta menos hecho y a otros les encanta que esté bien crujiente, puedes probar a hacerlo de distintas maneras según el día.

Finalmente, déjalo reposar unos 10 minutos y  trinca el pollo al ast con un tenedor grande de cocina. Sirve la salsa en un bol y que cada cual se eche la que quiera para acompañar el suculento manjar.

Puedes acompañar el pollo al ast con una guarnición a tu elección: boniatos asados, una ensalada con maíz y tomate o simplemente unas patatas fritas que hacen las delicias de los más pequeños.

El resultado es espectacular, y es una de estas instantáneas que merece la pena compartir en redes sociales para impresionar a los amigos. Esperamos que te haya gustado, ¡déjanos una foto para saber cómo te ha quedado!