Montadito de pringá
El mundo de las recetas está lleno de variedad: unas son orientales, otras occidentales, otras son cenas rápidas… ¿y si queremos una comida llena de sustancia, que nos llene y nos regale buenos momentos en familia? Entonces recurrimos a platos como el montadito de pringá.
Si ya te han sorprendido el bocadillo de pollo con chimichurri y el bocadillo de pollo y calabacín, nos alegra decirte que esta receta te va a encantar. La carne del pollo y la morcilla le darán un toque muy especial a este plato, que si bien no llega a la categoría de bocadillo, te da lo que necesitas para todas tus comidas.
¿Te gusta cómo suena? ¡Veamos cómo prepararlo!
Receta: Montadito de pringá
Ingredientes
- 100 g de morcillo de ternera cocido
- 100 g de pollo cocido
- 1 chorizo cocido
- 1 morcilla cocida
- 1 tajada de tocino cocido
- 4 panecillos de montadito, molletes o 1 baguette cortada en cuatro
Elaboración
Vamos a comenzar la preparación de estos montaditos por el relleno, es decir, por la pringá. Para ello lo que tenemos que hacer es coger las carnes del puchero y picarlas o desmenuzarlas. En el caso del pollo, desechamos pieles y huesos, y en el del tocino la corteza si estuviera dura o chiclosa.
El siguiente paso para tener la pringá lista es mezclar todas las carnes. Le podemos dar una textura homogénea y melosa manchando la mezcla un poco con el tenedor para que se integren bien. El tocino hará de elemento de unión entre los ingredientes.
Lo que nos queda es prácticamente hacer un bocadillo y, como en todo bocadillo, tenemos que abrir los 4 panecillos por la mitad. En este punto, si se desea, podemos tostar el pan por dentro, al gusto. Para ello lo pondremos boca abajo en una plancha bien caliente y vigilaremos de cerca para que no se nos queme.
Para acabar, ponemos a calentar la pringá para que vuelva a coger temperatura, se puede hacer en la sartén o incluso con un golpe de microondas. Rellenamos con ella el montadito. Un último paso también al gusto, sería poner el montadito en una sandwichera para calentarlo y tostarlo un poco por fuera. Servimos recién hecho.
¿Qué te ha parecido esta receta? Como siempre, puedes pensar un acompañamiento en forma de ensalada, o incluso unas patatas fritas si quieres redondearlo aún más. De esta forma ya tendrás el plato definitivo que enamorará a los más pequeños y dejará llenos de felicidad a los más grandes. ¡Que lo disfrutes!