Teppanyaki de pollo
Las recetas orientales son nuestra debilidad, porque reúnen lo mejor de las verduras con el pollo para traernos un plato exquisito. Este teppanyaki de pollo está en la línea del pollo teriyaki o los tallarines de arroz con pollo, dos comidas que dejarán satisfecha a toda la familia mientras degustan los mejores manjares de Japón.
Hoy te vamos a enseñar a cocinar una receta muy especial en la plancha, utilizando la mítica salsa de soja y añadiendo una cucharada de miel para darle ese toque dulce que se merece. ¿Quieres ponerte manos a la obra? ¡Pues sigue estos pasos!
Receta: Teppanyaki de pollo
Ingredientes
- 600 g de pechuga de pollo en filetes
- 100 g de zanahoria en dados o rodajas finas
- 100 g de brócoli en arbolitos pequeños
- Un puñado de hojas de espinacas frescas
- 200 g de cebolla en dados o en juliana
- 100 g de calabacín en dados o rodajas
- 180 g de pimiento verde
- 100 ml de salsa de soja
- Opcional: Una cucharada de miel y media cucharadita de jengibre en polvo
- 40 ml de aceite de oliva
- Semillas de sésamo
- Sal y pimienta negra
Elaboración
Para empezar, limpiamos la pechuga de pollo y cortamos en tiras o dados regulares. Después limpiamos y troceamos las verduras que hayamos elegido, dejando en tiras o en dados los pimientos, calabacín, brócoli, cebolla…
En la cocina oriental, se saltea en el teppanyaki cada cosa por separado hasta que adquiere su punto perfecto de cocción, pero nosotros lo haremos en sartén antiadherente con todos los ingredientes. De esta forma irán adquiriendo sabor durante el tiempo de cocción.
Ponemos un fondo de aceite en una sartén antiadherente o un wok. Salteamos el pollo un par de minutos hasta que tome color. Una vez listo, salpimentamos, revolvemos y retiramos de la sartén para más adelante.
En esa misma grasa (y con algo más de aceite), salteamos las verduras. Primero la cebolla, pimiento, brócoli y zanahoria. Pasados unos 5 minutos, ponemos el calabacín y las hojas de espinaca y dejamos que saltee todo junto, salpimentado durante otros 5 minutos más.
Cuando la verdura esté a punto, volvemos a poner el pollo, damos un toque de salsa de soja, revolvemos todo bien y ya podemos emplatar, recién hecho, nuestro teppanyaki de pollo. Si quieres dar un toque agridulce al plato, puedes mezclar la salsa de soja con una cucharada de miel y un toque de jengibre, que potenciará los aromas orientales.
Al momento de llevar a la mesa, espolvoreamos con semillas de sésamo. Podemos servir así, o acompañar de un arroz blanco, que hará la receta mucho más deliciosa. La elección de la guarnición es tuya, pero si añades carbohidratos tendrás un conjunto espectacular para saciar a todos los que están en la mesa.
Si te ha gustado este teppanyaki de pollo y verduras, no te pierdas el ramen de pollo y fideos. Si la combinas con las demás recetas, tendrás una opción perfecta para hacer una semana temática relacionada con el ingrediente del pollo y la cocina oriental. ¡Que aproveche!