Fingers de pollo
De la misma forma que toda la familia se relame cuando cocinas unos fingers de pollo, hoy te vamos a enseñar cómo preparar un plato fácil y muy, muy nutritivo: los fingers de pollo caseros. Con ellos los más peques de la casa van a quedar sorprendidos, mientras que los grandes lo van a disfrutar como si fueran niños.
Los fingers son unos palitos finos y alargados, de ahí su nombre, normalmente de pechuga de pollo, limpios de piel y grasa, empanados y posteriormente fritos. Podemos hacerlos para un entrante o aperitivo, acompañados de alguna salsa, o como plato único si los servimos con unas patatas fritas y una ensalada mixta, por ejemplo.
Tiene muchas posibilidades, así que no hablemos más y pongámonos manos a la obra para que te quede un plato espectacular.
Receta: fingers de pollo
Para la salsa
- Media pechuga de pollo
- Una pizca de sal
- Una pizca de pimienta negra molida
- 35 g de harina de trigo
- 1 huevo grande o 2 huevos pequeños
- 1 pizca de ajo en polvo
- 1 pizca de perejil seco picado
- 200 g de pan rallado grueso
- Aceite de oliva para freír
Elaboración
Lo primero que tenemos que hacer es cortar la media pechuga de pollo, en tiras alargadas de un grosor de 1,5 o 2 centímetros. Salpimentamos las tiras resultantes al gusto y reservamos.
A continuación, procedemos a realizar el empanado. Para ello, introducimos en una bolsa 35 gramos de harina de trigo, una pizca de sal y una pizca de pimienta negra molida; en un bol batimos 1 o 2 huevos, según el tamaño, junto con una pizca de ajo y perejil seco picado; en otra bolsa echamos 200 gramos de pan rallado grueso.
Primero introducimos varias tiras de pollo en la bolsa con la harina, la agarramos por el extremo de la apertura y agitamos energéticamente durante unos segundos, suficientes para que las tiras de pollo queden enharinadas. Las sacamos, las pasamos por huevo y por último las metemos en la bolsa con el pan rallado. De nuevo, agitamos bien la bolsa para que las tiras de pollo queden totalmente recubiertas.
Procedemos de igual forma con las demás tiras del pollo.
Echamos abundante aceite de oliva en una sartén y lo calentamos hasta alcanzar los 180 ℃. En ese momento, comenzamos a freír los fingers de pollo durante un par de minutos por cada lado y nunca con más de 4 unidades a la vez, para evitar que la temperatura del aceite baje de 180 ℃.
Una vez fritos los fingers de pollo por ambos lados, los retiramos del aceite y los dejamos sobre papel absorbente para retirar el exceso de aceite.
Emplatamos y servimos inmediatamente, para comer los fingers de pollo recién hechos acompañados con la salsa o guarnición que más nos apetezca. En cualquier caso, siempre puedes hacer unas patatas al horno o cualquier tipo de acompañamiento digno de un rey. ¡Que lo disfrutes!