Cómo hacer la hamburguesa de pollo perfecta
El próximo 28 de mayo se celebra el Día Internacional de la Hamburguesa y nosotros queremos celebrarlo enseñándote a preparar la hamburguesa de pollo perfecta. Un plato que, lejos de lo que puedas pensar, no nació en Estados Unidos.
¿Y si te decimos que el estandarte de la comida rápida o fast food tiene su origen en Hamburgo, Alemania? La referencia más antigua que se conoce de la hamburguesa data del imperio romano. Durante la Edad Media, los intercambios comerciales a través del puerto de Hamburgo -el más grande de Europa- posibilitaron que los hamburgueses aprendieran la receta a través de los tártaros de origen ruso, quienes comían la carne cruda y especiada. Y posteriormente fueron los inmigrantes alemanes de finales del siglo XIX quienes la introdujeron en Estados Unidos.
Receta: Hamburguesa de pollo casera
Ahora que ya sabes el verdadero origen de la hamburguesa, lo que no está claro es el nombre del cocinero, te vamos a dar la receta de la hamburguesa de pollo perfecta. Una exquisita combinación de jugosidad y sabor que hará que te chupes los dedos.
Ingredientes
300 g de pechuga de pollo
300 g de muslos deshuesados
1 cebolla
1 diente de ajo
1 huevo
Pan rallado
Pimienta
Sal
Aceite de oliva virgen extra
Elaboración
Si te has fijado bien en los ingredientes de esta hamburguesa de pollo, te habrás dado cuenta de la mezcla de carnes. Es uno de los trucos para que quede jugosa.
Empezamos picando en trozos muy pequeños el ajo y la cebolla y lo rehogamos. Cuando esté, sacamos y reservamos.
Picamos la pechuga de pollo y los muslos deshuesados y trozos pequeños. Puedes hacerlo con un triturador de alimentos o a cuchillo. Nosotros preferimos hacerlo a cuchillo porque no se trata de hacer una pasta, sino de conseguir una textura similar a la de la carne picada.
Cuando tengamos la carne picada, añadimos el sofrito de cebolla y ajo; el huevo, la sal, la pimienta y las especias que más te gusten. Mezcla bien para que se integren todos los ingredientes e incorpora el pan rallado. Evita que quede una mezcla muy dura porque perderá jugosidad.
Si quieres aportarle un toque gourmet a esta hamburguesa de pollo, añade a la mezcla trocitos de queso Cheddar o Edam. Una vez lista la masa, guárdala en la nevera, al menos, 30 minutos para que coja cuerpo.
Pasado este tiempo, haz bolas y aplástalas un poco. Es preferible que las hamburguesas queden un poco gorditas para que estén más jugosas. Echa un chorrito de aceite de oliva virgen extra en una sartén antiadherente y fríelas por ambos lados hasta que estén doradas.
Puedes disfrutar de esta deliciosa hamburguesa de pollo así, acompañada de un poco de ensalada, o montarla entre dos panes. Para ello, elige un buen pan y sírvela con los ingredientes que más te gusten. Nuestra combinación preferida: tomate, lechuga, cebolla sofrita, pepino, queso y tu salsa para pollo preferida. ¡Irresistible!