
Cuáles son las mejores especias para el pollo
Convertir una receta de pollo en un plato estrella puede depender, en gran medida, de cómo condimentes la carne. Puedes optar por sazonarlo con un básico como la sal y la pimienta o ir más allá. Nosotros vamos a contarte cuáles son las mejores especias para el pollo para que, a través del paladar, des la vuelta al mundo.
Las especias y las hierbas aromáticas aportan al pollo un gran sabor. Realmente, no hay una especia mejor que otra para condimentar esta carne. Todo dependerá de tus gustos y de la receta en sí. Dulce o picante, fresco, exótico… Tú eliges cuáles son las mejores especias para el pollo en función del resultado que desees conseguir.
Sal y pimienta
Como te hemos comentado, puedes sazonar la carne de pollo, ya sean pechugas, muslos o alas, con el tradicional condimento de sal y pimienta. Te recomendamos que utilices pimienta en grano y la muelas en el momento para que el sabor sea más intenso. También, puedes elegir una mezcla de pimientas.
Hierbas aromáticas
Laurel, tomillo, romero, perejil, albahaca… Todas ellas combinan deliciosamente bien con el pollo. Puedes utilizarlas tanto frescas, como secas. Estas hierbas le aportan al pollo un toque muy característico, con un sabor muy fresco.
Para sazonar la carne de pollo con hierbas aromáticas tienes distintas opciones. Puedes picarlas, mezclarlas con la sal y espolvorear la mezcla; puedes utilizarlas enteras y frotarlas por el pollo; colocarlas debajo de la piel o, incluso, si es pollo entero, ponerlas dentro.
Sabores exóticos
Otra opción es elegir especias como el comino, el cilantro, el jengibre, el curry o la nuez moscada. Todas ellas tienen un sabor muy especial que se impregnará en el pollo intensificando su sabor. Si quieres dar la vuelta al mundo sin moverte de casa, ésta debe ser tu elección.
Pimentón
El pimentón dulce o picante es otra de las especias perfectas para sazonar pollo. Para utilizarlo, mezcla el pimentón con aceite de oliva virgen extra (AOVE), haz como una pasta y extiéndela por el pollo. Le aportará un color rojizo de lo más sabroso y sugerente.
También, puedes mezclar todas las especias que te gusten en un bol, echar una cucharadita de mostaza de Dijon y zumo de limón. Mézclalo bien y haz una pasta. Embadurna bien el pollo. Déjalo reposar un par de horas en la nevera y prepárate para salivar con el resultado. ¡Espectacular!